COLOREE EL BLOG

gadgets para blogger

19 sept 2012

Residuo olanchitense



Cuando murió la bruja del barrio Guamilito en San Pedro Sula y que cada año Rodrigo Won Arévalo ponía  en la portada de la revista  Hablemos Claro e hizo que la mayoría  de los hondureños  nos hiciéramos las cruces, dizque prediciendo los acontecimientos políticos del país en el año, al chino se le ocurrió adoptar a una hez de Olanchito llamado Juan Ramón Martínez.
Pocas veces miro canal 10, solo me gusta el programa certificado por la Universidad Pedagógica, lamentablemente se me olvida el nombre, es sobre literatura y de cómo debemos hablar y escribir bien, yo no odio a nadie pero soy humano, basta con eso para que me entiendan.
Esta dupla maligna Won Arévalo y Ramón Martínez aparecen de repente, por casualidad en dicho canal cuando busco algo interesante, como no hay nada regreso  numéricamente  con el control, allí están los dos, y este residuo olanchitense  se emociona con las predicciones  que dice y que no pega una. Comentan diferentes temas; que a Chavez solo le quedan  tres días, que Mel Zelaya aquí, que Juan Orlando allá, en Honduras pasará esto, la crisis mundial será… solo  profecías y más profecías, Nostradamus se queda pequeño. Este falso profeta o brujo de la sociedad hondureña nombrado por los diferentes medios de comunicación con el eufemismo de analista nacional, sí que le quito el puesto a aquella bruja que gracias a Dios no recuerdo su nombre.
Olanchito ciudad la cual no conozco y no pierdo las esperanzas de visitar, es una tierra prodigiosa para producir intelectos; Ramón Amaya  Amador, José Adan Castelar y otros que son el orgullo de las letras hondureñas y grandes embajadores de la cultura nuestra como Roberto Quesada, futuro premio nobel para el país, (bueno ya se me pego lo de profeta) pero lo digo en serio sin el temor a equivocarme, Quesada ya llegó lejos como escritor, es una esperanza para el país, nos ha representado muy bien en Estados Unidos, actualmente reside en Nueva York. Este escritor es la puerta abierta para otros que abren sus alas con la pluma. Quise entrevistarlo,  lo contacte por la red social de Facebook, le dije;- si logro una entrevista con usted tengo la clase Seminario de Literatura Hondureña en la bolsa, me urge que me ayude. Amablemente me respondió accediendo a mi petición, al final no pude hacer la entrevista, no quería mandarle una serie de preguntas escritas, mi deseo era contactarlo por vía Skype, grabar la conversación y como no se usar este recurso tecnológico se esfumo el privilegio de contactarlo. En resumen, él no solamente es un orgullo de Olanchito sino del país.(Mil disculpas si estoy equivocado, tengo mis dudas me parece que es de Ceiba, pero justifico que esta ciudad esta cercana a Olanchito, seguro es ceibeño y olanchitense)
También es de allí Armando García, lástima que nació en Honduras sino fuera reconocido como un Eduardo Galeano en Uruguay. La sátira de este escritor es incomparable con ningún otro escritor hondureño. Perdí uno de sus últimos libros que publicó; “Humor Negro”, cuando lo busqué en todas las librerías  de San Pedro Sula, recibía la misma respuesta:- No hay. ¡Cuánto extraño su columna que salía en la Prensa; “Armandola”! recuerdo que salía todos los miércoles, a veces ese día no pasaban vendiendo el periódico por la casa en la Colonia Montefresco de Tela e iba al parque a comprarlo, solo por buscar esa columna, no me importaba pedalear en bicicleta como tres kilómetros. No sé que pasó con la dichosa columna. Le aseguro que leer a Armando García tiene garantizada las carcajadas. Esté escritor bautizó a nuestro país con el acertado nombre de “Corruptonia”. Tiene toda la razón.
Y así hay  personas importantes de Olanchito, conozco muchos, mis hijas tienen sangre olanchitense y santabarbarense, dos pueblos que cosechan hijos inteligentes, allí está la raza perfecta (lo digo metafóricamente o literalmente, aborrezco a Hitler). Pero este caso de Juan Ramon Martinez es excepcional, mas bien parece producto de un experimento humano del nazista Josef Rudolf Mengele, busque en Wikipedia o Google el nombre de este doctor y me dará la razón. Es más empiezo a sospechar que este nazista se cruzó por Olanchito.
En fin el excremento con manos y su tembladera que le agarra, al verlo se me revuelve el estómago, ya cuando estoy a punto de vomitar cambio de canal o apago el televisor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario